Pablo Iglesias Posse es, sin duda alguna, un referente para las diversas corrientes del movimiento socialista español. Su figura ha sido reivindicada desde el mismo día de su muerte, a finales de 1925. En cierto sentido, su figura y tratamiento a lo largo de los años también simbolizan los cambios que ha ido teniendo el partido hasta la actualidad.
El autor de esta obra es Francisco de Luis Martín, catedrático de Historia Contemporánea por la universidad de Salamanca. Su trayectoria en lo que refiere al movimiento obrero es extensa, teniendo obras sobre la represión durante el franquismo, la FETE y la cultura obrera en España.
Pablo Iglesias Posse, fue el mayor organizador del PSOE y del movimiento socialista desde finales del siglo XIX. No fue un intelectual, tampoco provenía de la clase media, sin embargo, si fue un hombre formado al que sus defensores veneraban y al que sus detractores demonizaron.
Una de las ideas fundamentales que saco de esta obra es que, como se verá claramente en la década de 1930, el PSOE es un movimiento engrosado tanto por obreros como por intelectuales provenientes de las clases medias.
Esto es realmente importante para comprender las diversas tendencias del partido. Para resumir, la tendencia más obrerista estaría representada por Largo Caballero y la notable tendría nombres como Julián Besteiro o Indalecio Prieto, los tres colaboradores con Pablo Iglesias en la década anterior.
Respecto a su figura, es interesante como se tratan las diversas cuestiones que fueron fundamentales en cuanto a su acción política como líder del PSOE. Dos de las más importantes fueron tanto la semana trágica de Barcelona en 1909 como la guerra en Marruecos, que ocupó las tres primeras décadas del siglo XX español.
El autor nos ofrece un tratamiento exhaustivo de su funeral a través de la prensa del momento. Su figura fue alabada por los periódicos afines, sin embargo, también fue tratada como principal por algunos periódicos de otras corrientes, destacando ellos también, pese a sus diferencias, la figura del líder obrero.
La figura del “abuelo” fue sacralizada desde el mismo momento de su muerte. El autor pretende mostrar eso a partir de las diversas portadas de los periódicos como “El Socialista” o “El Liberal”.
Por último, el autor recopila los diversos homenajes que ha recibido la figura del fundador del PSOE desde su muerte hasta la actualidad, además de tratar la cuestión de su sucesión tras su muerte en 1925.
En mi opinión esta obra es fundamental si queremos comprender el significado que tiene para los militantes y cuadros del PSOE la figura de Pablo Iglesias. También me parece interesante el tratamiento que tiene su funeral y la comparación que lleva a cabo el autor con la figura de Maura, uno de los políticos más importantes de la restauración.